¡Hola Luz de sol!
Los muros pueden hablar (y lo hacen), y estos dicen: "Que haya luz". Le mostraremos cómo incorporar azules relajantes, serenos. verdes y amarillos vivos de maneras inesperadas, al tiempo que ofrece pruebas de que el rosa y el púrpura pueden verse sorprendentemente sofisticado. ¿Preparado para comenzar?
Lección # 1: Espejo Madre Naturaleza
Para una paleta sin fallas, adopta el aire libre como tu musa. Perfeccionar el ambiente costero de esta habitación, con sombras de arena, surf y vidrio marino, fue un día proverbial en la playa.
Lección # 4: Templar una sombra dulce con un motín de patrón.
Toiles salpicados, geometría y rayas le dan a la lavanda fría una curva al rojo vivo.
Lección # 5: Falsa grandeza arquitectónica.
Dos verdes vivos, más molduras adhesivas, crean la ilusión de un personaje personalizado.
Lección # 7: Deja que un tono sin miedo haga el trabajo pesado.
Luego llene los espacios en blanco con muebles blancos. Las texturas rugosas, como la madera desgastada y las cañas tejidas, compensan las tendencias femeninas del rosa.
Lección 8: Ve contra el grano de madera.
En lugar de una mancha o pintura blanca lisa, el uso de verde pone una nueva cara en el almacenamiento clásico de la cocina.
Lección # 9: No pases por alto el piso.
Directamente debajo de tus pies, hay una superficie esperando ser transformada con rayas nítidas y anchas. Idea brillante: Un simple gancho convierte un salvavidas vintage en un arte de pared alegre.